Hay motos que entran por los ojos, pero hay otras que te tocan el alma. Un claro ejemplo son las scramblers, que atrapan con su estética retro, su espíritu todoterreno y ese aire rebelde que las hace irresistibles. Ahora bien, ¿cuál es la mejor opción para el carnet A2? Si piensas que una moto scrambler de 500 cc es la solución perfecta, no vas desencaminado. Pero no todas son iguales. Algunas destacan por su diseño, otras por su comportamiento en carretera y unas pocas te permiten jugar fuera del asfalto sin miedo a quedarte corto. ¿Quieres saber cuáles son las mejores motos scrambler A2? Vamos al lío.
Triumph Scrambler
Cuando se habla de motos scrambler Triumph es una marca que siempre aparece, y no es casualidad. Lleva décadas perfeccionando la fórmula, y su gama Scrambler no solo es una de las más deseadas, sino también de las más completas.
Dentro del carnet A2, la Triumph Scrambler 400 X es una opción sensacional. Cuenta con un motor monocilíndrico de 398 cc, 40 CV y un par motor de 37,5 Nm. No es la moto más potente, pero es una de las mejor construidas. Con su chasis de acero, suspensiones de largo recorrido y una posición de conducción cómoda, es una scrambler que invita a recorrer kilómetros sin que el cuerpo pase factura.
Su diseño es puro ADN británico: depósito redondeado, escape alto, asiento plano y ese toque clásico que enamora. Pero no te dejes engañar por su estética vintage, porque en tecnología no se queda atrás. Trae ABS desconectable, horquilla invertida y un cuadro de instrumentos moderno, todo pensado para que disfrutes en carretera y en caminos sin asfaltar.
¿Es la mejor scrambler A2? Depende. Si buscas una moto con una calidad de construcción impecable, una imagen icónica y una marca con historia, la Triumph Scrambler es difícil de superar. Aunque si prefieres algo más radical o con un precio más ajustado, hay otras opciones que pueden encajar mejor.
Fantic Caballero 500 Scrambler
Si la Triumph es la opción más refinada, la Fantic Caballero 500 Scrambler es la más canalla. Es una scrambler con alma de enduro, perfecta para quienes quieren un modelo ligero, ágil y sin demasiadas complicaciones.
Hablamos de una moto scrambler de 500 cc con 45 CV y un peso de solo 150 kg. Una moto ágil, divertida y muy manejable. No hay kilos de más ni plásticos innecesarios. Solo lo justo y necesario para hacerte sonreír cada vez que giras el puño.
La Fantic Caballero brilla fuera del asfalto. Con sus ruedas de 19” delante y 17” detrás, su escape elevado y su chasis tubular, es una scrambler que se siente en casa en caminos de tierra. No es una enduro pura, pero si buscas una moto con la que puedas hacer trail ligero sin renunciar a una estética scrambler auténtica, esta es de las mejores opciones.
Eso sí, no todo es perfecto. Su depósito es algo pequeño (12 litros), no tiene protección aerodinámica y el asiento es algo duro para viajes largos. Pero si lo que quieres es una scrambler A2 con espíritu de moto de campo, pocas opciones son más puras que la Fantic Caballero 500.
Benelli Leoncino Trail
Si Triumph representa la elegancia y Fantic la diversión sin filtros, la Benelli Leoncino Trail es la opción más equilibrada, y también la más accesible. Porque si hay algo que caracteriza a Benelli es ofrecer motos con una gran relación calidad-precio.
La Benelli Leoncino Trail monta un motor bicilíndrico de 500 cc con 47 CV, el límite del A2. Es una scrambler robusta, con un chasis de acero, suspensiones de largo recorrido y neumáticos mixtos sobre llantas de radios. Todo pensado para que puedas moverte con soltura tanto en carretera como en caminos de tierra.
Uno de sus puntos fuertes es la estabilidad. Con un peso de 207 kg y una buena puesta a punto, la Leoncino Trail se siente muy asentada en carretera. No es la scrambler más ligera ni la más radical, pero es cómoda y transmite confianza. Además, su estética es un acierto: líneas clásicas con un toque moderno, un faro LED redondo y el icónico león de Benelli en el guardabarros delantero.
Si buscas una scrambler A2 con un motor más lleno que las monocilíndricas, pero sin un precio excesivo, la Benelli Leoncino Trail es una gran opción. Su único punto débil es el peso, que se nota en maniobras en parado y en tramos muy revirados. Pero en conjunto, es una scrambler con mucha personalidad y un precio difícil de batir.
Rieju Tango
No todo el mundo quiere una scrambler grande y potente. Algunos buscan una moto simple, ligera y divertida para moverse sin complicaciones. Y ahí es donde entra la Rieju Tango Scrambler.
Esta pequeña scrambler es la más modesta de la lista, pero también la más versátil en ciudad y terrenos fáciles. Con su motor de 125 cc y su peso de solo 93 kg, es una moto que se mueve como una bicicleta. Ideal para quien busca una moto scrambler A2 sin pretensiones de grandes viajes ni de hacer trail serio.
Su diseño recuerda a las scrambler clásicas: depósito compacto, asiento plano y neumáticos mixtos. Pero donde realmente destaca es en su facilidad de conducción. Es una moto perfecta para quienes quieren iniciarse en el mundo de las scrambler sin complicaciones.
Su motor es limitado, pero en ciudad y en caminos de tierra, es una moto muy divertida y fácil de llevar.
¿Qué scrambler A2 elegir?
Si buscas una scrambler A2 con historia y una calidad de construcción impecable, la Triumph Scrambler es la opción premium. Si quieres una moto ligera y juguetona con auténtico espíritu off-road, la Fantic Caballero 500 es la más pura. Si prefieres una scrambler equilibrada y con un motor bicilíndrico potente, la Benelli Leoncino Trail tiene mucho que ofrecer. Y si lo que quieres es una moto sencilla y ultraligera para moverte con facilidad, la Rieju Tango es una opción interesante.
Sea cual sea tu elección, todas estas scramblers cumplen con el espíritu aventurero y libre que define a este tipo de motos. Y lo mejor de todo es que puedes llevarlas con el carnet A2 sin necesidad de limitarlas.
Solo queda hacerte una pregunta: ¿cuál es la tuya?